¡El movimiento de personas con discapacidad ha logrado crear una victoria!

La Cámara de Diputados rechazó el veto a la emergencia en discapacidad. Sin duda alguna este acontecimiento es una victoria política que rebalsa ampliamente al colectivo de personas que protagonizan la batalla y sacude la resignación de los diferentes conjuntos de sectores en lucha contra la miseria planificada que ejecuta el gobierno de Milei y sus aliados.

Al respecto, queremos decir algunas cosas como para hilvanar en alguna conversación.

Quizás, asumir la profunda derrota política (y su consecuente diáspora social) del proyecto nacional y popular en particular, e incluso la profunda derrota política del estado de derecho e inclusión en general, digo, quizás asumir esa derrota nos permita darle mayor relevancia a la victoria de hoy que supo construir el movimiento de personas con discapacidad.

Y acá vale una aclaración, asumir una derrota es cosa muy distinta a estar derrotados.

Estar derrotados tiene más gusto a la costumbre de dejarse conducir por gente que mide la política con la vara de sus conveniencias personales. ¿No? Un cierto gusto a resignación. Quienes intentamos asumir la derrota política hemos mascullado los escombros esos que causan tanto dolor e impotencia. E incluso, a veces, seguimos mascullando.

Pero digo, asumir la derrota en cambio, se presenta como condición de posibilidad de revisar nuestras propias prácticas políticas, para encarar de otra manera este presente tan adverso donde nos encontramos peleando por declaraciones de emergencias, alguito de presupuesto  y contra vetos de un gobierno cruel y demencial. Un gobierno cruel que tiene tantos aliados como consenso tiene el maldito déficit cero.

Pero no veníamos a hablar de la derrota, sino de su reverso. Venimos a hablar de la victoria, de victorias políticas como creación popular, más allá del estado, no por fuera del estado, sino sobrepasándolo.

Victoria política como creación colectiva, más allá de legisladores, no desconociéndolos, sino arremetiéndolos.

Victoria política como creación singular y plural, más allá de identidades rígidas y excluyentes, no como negación de ellas, al contrario, con la potencia de los cruces que surgen del entrevero de sueños y dignidades.

¡El movimiento de personas con discapacidad ha logrado crear una victoria!

Resulta necesario e imprescindible vincularnos de alguna manera que haga posible las combustiones necesarias para crear dos, tres, muchas victorias más. Victorias políticas como creación singular, plural, colectiva y popular. 

¡La consigna es crear dos, tres, muchas victorias más!

*La Raíz del Grito es un programa radial que se emite los miércoles de 21 a 23 horas por el Sistema Integrado de Radios de la Universidad Nacional de Entre Ríos.